El paso
Fue realizado por Antonio Ibáñez Vallés, sobre diseño de Alberto Fernández Barrilao, siendo acabada su ejecución en talla en el año 2004. Su dorado se realizó entre los años 2004-2007 por D. Emilio López Olmedo y sufragado en parte por las donaciones de hermanos y simpatizantes. Realizado en madera de cedro real, presenta respiradero de paño corrido, canasto en forma de quilla con distintos niveles ornamentales y maniguetas. Se ilumina con 6 candelabros de guardabrisas, 4 de siete luces en las esquinas y 2 de tres luces en los costeros.
En la visión de conjunto del paso destaca de forma muy notable una sensación de valentía en sus formas, fruto de los vertiginosos perfiles de la gran canastilla y por otro lado de orden y minuciosidad dada la cuidada labor de diseño y talla.